Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
El número óptimo de pliegos dependiendo de la imposición y el número total de páginas que se desea es un aspecto clave del cálculo de costes en imprenta comercial de revistas, libros y otros documentos con un número elevado de páginas. Por lógica física, un cuadernillo siempre tiene un número de páginas múltiplo de cuatro: 4, 8, 16, 32, 64… En impresión digital sin planchas esta constricción numérica no existe al no existir ni planchas ni pliegos.
La limitación numérica se suele superar combinando pliegos de distintos tamaños en una misma publicación. Una publicación puede, por ejemplo, tener 20 páginas si el pliego interior es de un tipo de papel y el exterior —para portada y contraportada— es de mejor papel, y tiene 4 páginas. De no ser así, la lógica comercial es 16 o 32 páginas.
Si una publicación tiene más de un pliego, los correspondientes cuadernillos pueden ir embuchados uno dentro de otro (si no son demasiados y el papel es fino) o ser sucesivos.
Inglés:Preflight • Francés:Contrôle en amont • Italiano:Verifica preliminare, preflight
En artes gráficas, la operación de comprobar que un documento reune las condiciones para enviarse a imprimir. Muchas veces se usa directamente la expresión inglesa preflight, sacada de la jerga aeronáutica, donde se usa para denominar la lista de comprobación previa que los pilotos deben hacer en voz alta antes de despegar ("¿combustible?, OK. ¿Indicador de radio?: OK, ¿Frenos de suelo?: OK…").
Las comprobaciones más usuales de un diseño destinado a imprenta son: Que no haya problemas con las fuentes tipográficas, que los colores de los elementos estén definidos como requiere el proceso, que la resolución de las imágenes sea la adecuada (ni demasiado alta ni demasiado baja), que las sangres y plegados estén definidos correctamente, que no haya texto cortado o desplazado y similares.
La comprobación previa de documentos es imprescindible en artes gráficas porque impide que haya que parar la producción una vez iniciada si uno de los documentos tiene fallos, y ahorra costes al evitar esas paradas o que haya que repetir los trabajos erróneos.
Aunque existen programas específicos para esta comprobación de documentos (como Flightcheck, de Markzware), lo usual es que los programas más profesionales de diseño gráfico (InDesign o Quark XPress, por ejemplo), incluyan opciones de comprobación previa.
Inglés:Destination colour profile (GB), Destination color profile (EEUU) • Francés:Profil de coleur destination, Profil de destination • Italiano:Profilo colore di destinazione, Profilo di destinazione
Perfil de color que describe los datos con los que se termina una conversión de color entre perfiles. En este caso, la parte importante del perfil es la que describe la conversión desde el espacio de conexión de los dispositivos (PCS) hacia los datos de los colorantes del dispositivo en el que se va a reproducir.
las conversiones entre un perfil de origen y uno de destino.
Algunos perfiles (como el de un escáner, que es de entrada) sólo pueden actuar como perfiles de origen. Otros pueden actuar como origen o destino; por ejemplo un perfil de impresora es de destino (representa el color el aparato en el que se reproducen los datos finales) y, a la vez, puede ser un perfil de origen (por ejemplo, al modificar una imagen ya preparada para imprimir que se reutiliza en otro trabajo).
Inglés:Perfect binding, Burst perfect binding [fresada], Soft cover binding • Francés:Reliure en dos collé, Reliure en dos carré collé • Italiano:Legatura in brossura fresata [fresada], Rilegatura in brossura a filo refe [cosida] • Catalán:Enquadernació en rústica, Enquadernació a la rústica
Un libro de la editorial Saturnino Calleja encuadernado en rústica.
Encuadernación de libros en la que las tapas son blandas, de papel, plástico o cartulina, por contraposición a la encuadernación tradicional con tapas duras —llamada encuadernación en cartoné—. Las tapas y las páginas del libro van unidas en el lomo mediante pegamento, a diferencia de la encuadernación a caballete, en la que las cubiertas también son blandas pero el cuadernillo va grapado.
Dos ejemplos de encuadernación en rústica, cosida (a la izquierda) y fresada (a la derecha).
Este tipo de encuadernación, que puede y suele tener más de un cuadernillo, nació como forma de abaratar el coste de los libros. En sus formas originales, los libros en rústica ni siquiera iban propiamente guillotinados y los bordes del papel tenían barbas e incluso carecían del corte en algunas de sus páginas. Con el tiempo, la encuadernación en rústica se generalizó y casi todos los libros de bolsillo se vendían en dos ediciones: De tapa blanda (rústica) y de tapa dura (cartoné).
La encuadernación en rústica se puede dividir actualmente en tres tipos principales:
Encuadernación en rústica fresada: Las hojas van sueltas, sin formar cuadernillos, y se unen entre si y a las tapas con pegamento al lomo. El taco de páginas se fresa en el lado del lomo antes de pegarlas para que agarre mejor el pegamento. Este tipo de encuadernación se llama a veces "encuadernación a la americana".
Encuadernación en rústica cosida: Las hojas van formando, en pliegos, que se cosen en cuadernillos. Todos ellos se unen entre si y se pegan a las tapas en el lomo.
Encuadernación en rústica con cola de poliuretano reactivo (PUR): Además de los pegamentos tradicionales, a finales de los años ochenta del siglo XX aparecieron unas colas de poliuretano reactivo (PUR). Estos adhesivos son muy resistentes y sólo hace falta aplicar un tercio del pegamento en comparación con los tradicionales.
Aunque el uso de pegamento PUR no está técnicamente reñido con la encuadernación en rústica cosida, al ser más caro, sólo tiene sentido usarlo en la rústica fresada, que con el uso de PUR se vuelve tan resistente como su alternativa cosida y es mucho más rápida y barata. Por eso, hablar de encuadernación en rústica PUR es casi siempre sinónimo de rústica fresada unida con esos pegamentos.
En la actualidad es más habitual utilizar el término "(de) tapa blanda" para este tipo de encuadernación. También se denomina "de bolsillo", aunque en buena ley, esta denominación sólo abarca un tipo reducido de encuadernación en rústica.