Términos al azar
Offset seco
Procesimiento de impresión comercial que combina las técnicas de la litografía offset y la tipografía convencional. En el offset seco, la plancha que recibe la tinta tiene un poco de relieve (como en tipografía). Al girar, la plancha transmite la tinta a la mantilla, de donde pasa al medio que se va a imprimir. El adjetivo de "seco" proviene de que la plancha no se humedece, al contrario que en el caso de la litografía offset.
El proceso fue desarrollado en los Estados Unidos para la impresión parcial de cheques y sellos postales.
Cabecera
En una publicación periódica, el nombre o logotipo que la identifica. Normalmente aparece en una zona preferente de la publicación, donde el usuario la ve con facilidad, y puede así identificarla. En los periódicos o revistas impresas, ese punto es la zona superior de la primera página (la portada).
La cabecera no sólo es una palabra o grupo de palabras (El Adelantado de Siberia, por ejemplo), sino que además implica una tipografía y disposición de colores, incluyendo a veces colores especiales.
Varios ejemplos de cabeceras famosas. La cabecera suele estar registrada comercialmente en su forma y nombre, y es propiedad de una persona o empresa.
- En un archivo EPS o PDF, la zona de inicio del archivo que identifica el archivo (formato, versión del mismo, etc.).
Ex libris
Logotipo o imagen y textos que se aplica a los libros (usualmente en la parte interior de la portada o guardas) para indicar que el ejemplar pertenece a una biblioteca concreta (de una persona o institución, ya que ex libris quiere decir en latín "de los libros de…"
Los ex libris suelen tener forma de sellos para aplicar como tampones de tinta sobre las páginas del libro o de etiquetas para aplicar (con pegamento o autoadhesivas), aunque esto último es menos usual.
Formato local
En composición y edición tipográfica digital, La modificación directa del aspecto de palabras o caracteres concretos evitando el uso de generalizaciones como las hojas de estilo.
En buena composición digital y salvo casos muy concretos, el formateo local es una práctica chapucera que debe evitarse, ya que impide la modificación rápida y homogénea del aspecto de los textos o gráficos. El formateo local mezcla formato y contenido dificultando su tratamiento por separado. Es el concepto contrario a aplicar hojas de estilo.
Aplicar cursivas, negritas, superíndices y subíndices a palabras concretas no es, en principio, formateo local, ya que su utlización es conceptual, no meramente formal.