Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Persona que se encargaba de escribir textos en un teclado en la época de la composición analógica electrónica, hacia finales del siglo XX (entre la impresión con tipos de plomo y la edición digital plena, con la expansión de Internet). Sucesores de los linotipistas (pero menos especializados), los teclistas eran personal imprescindibles en los talleres de preimpresión, editoriales y periódicos.
En imágenes digitales de mapas de bits, defecto debido a que la resolución de la imagen es tan baja que los píxeles que la forman se hacen excesivamente evidentes al ojo humano. Se nota sobre todo en los bordes de las imágenes, donde aparecen escalonados y molestos mosaicos.
Dos aspectos de una misma imagen: Pixelizada y con resolución adecuada.
No debe confundirse la pixelización con los defectos debidos a una compresión JPEG excesiva (JPEG artifacts).
En artes gráficas, la cadena de tareas y personas implicadas en la creación de un producto o parte de él. No es raro encontrar el anglicismo "flujo de trabajo".
Definir bien los sistemas de trabajo es esencial para conseguir la reducción de costes y periodos de tiempo, y disminuir al máximo los errores. La estandarización de los sistemas de trabajo ayuda mucho para ello.
Acabado que en imprenta se da a los impresos para protegerlos y armarlos, cubriendolos de una capa transparente. La capa protectora es una película plástica que se aplica sobre la superficie, a la que se pega —usualmente por aplicación de calor—. Este tipo de laminado protege mucho más que un barniz, sea del tipo que sea.
En buena ley, cuando se habla de laminado se suele estar haciendo referencia al plastificado y no al barnizado, que son técnicas distintas. De hecho, la aplicación de ambas técnicas a un mismo trabajo no es contradictoria; en tapas de libros y memorias de empresa, por ejemplo, las máscaras de barniz brillante se suelen aplicar sobre glasofonados mate.
Los plastificados pueden ser de diversos materiales plásticos —como el polipropileno—, distintos acabados —mate, satinado o brillante— y texturas —rugosa, simulando tejidos, etc.—. Se suelen aplicar sobre papeles o cartulinas no porosas ni rugosas, ya que estos acabados suelen producir defectos en forma de pequeñas burbujas y, además, su uso no tiene sentido al ir en contra de la finalidad última del laminado. No se pueden aplicar sobre papeles de poco gramaje —menor a 100 g/m2 aproximadamente—.
También se llama plastificado, peliculado o glasofonado —en el fondo, denominaciones distintas para una misma técnica—. Sin embargo, hay personas y empresas que hacen distinciones, por lo que siempre conviene concretar las especificaciones en los trabajos en los que se use.