Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Cada una de las unidades conceptuales mínimas de la escritura de un idioma en un sistema de escritura dado, más allá de las cuales, los escrito no se puede descomponer en unidades menores que se puedan utilizar de forma independiente.
Caracteres son las letras, cifras, signos de puntuación e ideogramas —en aquellos sistemas de escritura que sean ideográficos—. No son caracteres los signos diacríticos, ya que no se utilizan de modo independiente, sino siempre necesitan otro caracter para complementarlo.
Caracteres de distintos sistemas de escritura.
Los caracteres son unidades conceptuales —de hecho en linguística se denominan grafemas— porque en la mayoría de los sistemas de escritura no tienen una única forma de realizarse, sino que cada uno de ellos pueden y suelen tener versiones —en linguística, alógrafos—. Tres de las principales son:
1. Su posición en la frase o la palabra.
Variantes mayúsculas y minúsculas de distintos caracteres.
Cada par de letras mayúsculas y minúsculas del alfabeto latino tiene una forma distinta
Las cuatro variantes posicionales del caracter para el fonema yim en árabe.
2. El sentido que se quiera dar a las palabras o significados que transportan.
Variantes de la letra a en redonda y en cursiva.
En las tipografías del alfabeto latino, la a minúscula tiene una versión cursiva o manuscrita y otra propia de las formas regulares o negritas —no cursivas—.
3. Razones estilísticas sin mayor significado.
Variantes de distintos caracteres en grafía latina.
En las tipografías latinas, la letra g minúscula tiene varias formas de realizarse. Algunas grafías llevan gracias, florituras o serifas y ello no cambia en absoluto su significado pero sí su aspecto.
En sentido estricto, la sensación de color que se obtiene una luz compuesta principalmente por emisiones del extremo inferior del espectro (sensación de violeta) y del extremo superior (sensación de rojo). Como se obtiene mediante la mezcla de dos radiaciones luminosas con longitudes de onda no contiguas en el espectro luminoso, el púrpura es un color no espectral.
Una muestra de un tono púrpura.
En sentido general, en decoración y pintura, un tonomorado medio, brillante y vivo usualmente asociado en Occidente con el poder político y religioso, entre otras cosas porque el tinte con el que se obtenían las variedades más resistentes y brillantes era antiguamente muy caro.
Representación de César ataviado con una toga púrpura como vencedor de los galos.
En composición tipográfica, la columna que tiene un ancho distinto al previsto como normal en una maqueta; por ejemplo: En una composición a tres columnas de 12 picas de ancho, una columna a 14 picas es una "columna falsa" (se le ha aplicado una "medida falsa"). Una columna al ancho de dos columnas en una página dividida en tres columnas también sería una columna falsa.
El uso de una medida falsa es un recurso muy habitual en diseño gráfico (por ejemplo, para despieces), pero conviene no abusar de él para que la sensación de columnado ordenado no se pierda.
Este espacio, utilizado aún hoy día en, sentó las bases de la colorimetría moderna al ser el primer espacio de color en el que se podían correlacionar de forma objetiva sensaciones de color con fenómenos del mundo físico como las longitudes de onda de la luz.
Este espacio de color es un modelo matemático en el que cada valor se describe mediante una matriz de tres estímulos primarios, de ahí que sea posible describirlo mediante la metáfora de un volumen tridimensional de coordenadas cartesianas.
Pese a que los tres ejes parecen describir un cubo, los límites de ese volumen (que representa la vista del ser humano medio) son muy irregulares, ya que nuestra capacidad visual no es igual en los tres vectores (imaginarios o no).
Con el espacio de color CIE XYZ 1931 se describen todas las percepciones que el humano promedio es capaz de percibir. Este humano ideal se denomina "Observador CIE de 2º", ya que en los experimentos sólo se midió la respuesta del color cuando los las luces llegaban a la fóvea (lo que desde el cristalino del ojo es un ángulo de dos grados).
Los tres colores primarios de este espacio de color no describen sensaciones de color reales, sino que son el resultado de transformaciones matemáticas aplicadas sobre las funciones de igualación del color originales para lograr que no hubiera valores negativos y que el segundo primario se igualase con la función de eficiencia luminosa, derivada de los experimentos que dieron lugar a este espacio.
Estas transformaciones buscaban simplificar los cálculos colorimétricos, lo que en una época en la que no existían los ordenadores era algo muy importante.
La consecuencia es que estos primarios CIE no describen colores reales sino valores imaginarios, simples modelos matemáticos creados para hacer cálculos colorimétricos.
Las limitaciones tecnológicas forzaron que la presentación de los valores colorimétricos se hiciera habitualmente con diagramas de cromaticidad bidimensionales.
Pese a la aparición de espacios de color mucho más intuitivos como CIELAB 1976, el espacio de color CIE XYZ 1931 sigue en uso.