Pequeño documento impreso de distribución gratuita creado con fines propagandísticos o publicitarios. A diferencia de las octavillas, tiene más de una página o cara, pero nunca supera las pocas páginas. Tampoco pretende describir una colección de materiales de forma exhaustiva —cosa que sí hace un catálogo—.
Aunque no hay una norma de formato y paginación, es usual que los folletos consten de una sóla hoja doblada con dos, tres o cuatro pliegues para formar varias páginas. En este sentido, abundan los formatos de díptico o tríptico, y los plegados en acordeón, ventana, en cartera, cruz y otros.
Por eso, el tamaño de la hoja empleada como base para el tríptico puede variar y no tiene porque ser necesariamente un formato de papel ISO.