Tinta de hojaldre

Tinta plastisol con un agente espumante termoreactivo que, al calentarse, amplía su volumen, creando así una capa con un cierto relieve. Se usa en serigrafía, especialmente en impresión de textiles.
Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Aviso: Este glosario está en una actualización interna importante. Durante algún tiempo algunos enlaces podrían no funcionar adecuadamente. Gracias por la paciencia.
Gustavo Sánchez Muñoz (Gusgsm), 2025
Tinta plastisol con un agente espumante termoreactivo que, al calentarse, amplía su volumen, creando así una capa con un cierto relieve. Se usa en serigrafía, especialmente en impresión de textiles.
Un iluminante tipo luz de día ya en desuso, definido por la CIE como la distribución espectral del Iluminante A modificada por una serie de filtros líquidos para representar una temperatura de color de 6.774 K.
Aunque el Iluminante C dejó de ser un Iluminante CIE estándar en 1963 (era una representación muy pobre de la luz del día, ya que contenía demasiada poca energía en las longitudes de onda más corta), aun se sigue usando en algunas mediciones y herramientas.
Mezcla de "Cian, Magenta y Amarillo", considerados los tres colorantes primarios sustractivos básicos (en oposición a "Rojo, Verde y Azul", los tres colorantes primarios aditivos por excelencia).
En un mundo con colorantes perfectos y sin consideraciones económicas, la mezcla CMY bastaría para reproducir todos los tonos, incluidos los tonos neutros más oscuros, como el negro, en la vida real, para reproducir esos tonos neutros hace falta una cuarta tinta (el negro o "K"), que además es más barata y fácil de controlar.
En imprenta, es costumbre contraponer los valores CMY a sus contrapartidas de sólo negro por razones cromáticas y económicas.
Que se ha vuelto a tramar. Usualmente se trata de materiales gráficos (fotografías o dibujos) que ya fueron publicados y que se vuelven a someter al proceso de semitonos para su republicación. El resultado, salvo que se observen unas mínimas precauciones, suele ser una gran pérdida de calidad y la aparición del llamado muaré. Hay algunas técnicas, como el destramado, para evitarlo.
Algo definido con valores numéricos usando algún modelo o sistema matemático (como por ejemplo, la numeración binaria).
Pese a la creencia popular, la codificación digital de la información no es necesariamente mejor o peor que la analógica. la calidad de ambas depende de la precisión del método seguido para la captura, codificación y mantenimiento de los datos.
Los métodos digitales suelen permitir descomponer los datos en piezas reducidas y aisladas muy fáciles de transmitir, guardar y reconstruir. Pero si los diseñadores de un procedimiento o formato de almacenamiento no fueron muy cuidadosos, la pérdida de una parte de los datos puede causar la perdida del conjunto total por lo que se denomina "corrupción" de datos.
Bien aplicada, la codificación digital de la información (no necesariamente binaria) tiene la ventaja frente a la analógica de que es más difícil que se degrade en comparación con los métodos analógicos. Esto se debe a que permite incluir sistemas y métodos de redundancia, verificación y autocomprobación (checksum por ejemplo).
Por el contrario, uno de los principales problemas que tiene la codificación digital es la cuantización que aparece cuando la complejidad del método elegido no hace justicia a la complejidad de los datos que se almacenan. Los métodos digitales, como los analógicos, no conservan aquellos datos cuya inclusión no se haya contemplado.
Además, una de las ventajas de los sistemas digitales de almacenamiento de la información es que permite muchos métodos de su encriptación o cifrado.