Fuente luminosa
Algo que emite luz. Es un término intencionadamente vago para incluir cualquier cosa: El sol, una bombilla, una cerilla, un tubo fluorescente, etc.
Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Gustavo Sánchez Muñoz (Gusgsm), 2025
Algo que emite luz. Es un término intencionadamente vago para incluir cualquier cosa: El sol, una bombilla, una cerilla, un tubo fluorescente, etc.
En una familia o fuente tipográfica, la variante formada por el conjunto de pequeñas letras mayúsculas ligeramente mayores que la altura de la eme de esa fuente. El singular es "versalita" (una versalita, varias versalitas).
Es una variante al mismo nivel que las cursivas, negritas y similares, por lo que no tiene subvariantes (es decir: No hay versalita cursiva, por ejemplo). La verdadera versalita no es simplemente una mayúscula reducida (como hacen muchos programas informáticos), sino que es una variante diseñada al efecto.
La diferencia entre una verdadera versalita y las pseudoversalitas o falsas versalitas que hacen muchos programas es que su trazo de los tipos está descompensado respecto al de la fuente a la que acompañan (por ser una simple reducción).
Sólo se encuentran en fuentes con un acabado profesional, ideadas para masas de textos razonablemente grandes (no las hay en fuentes de fantasía) y no suele fabricarse para fuentes de palo seco.
Aparte de las libertades creativas que puedan hacerse, se suele usar para especificar fechas en números romanos dentro de textos, para abreviaturas o siglas (como A.D. para anno Domini o D.C. para Distrito Federal) y palabras que se quiere destacar de alguna forma dentro de esos textos sin tener que usar la negrita).
Fenómeno óptico por el que, cuando un rayo de luz que viaja por un medio y se encuentra con otro distinto, penetra en este segundo medio y cambia de dirección debido a que el nuevo medio tiene una densidad óptica distinta.
El ángulo con el que el rayo se desvía respecto a la línea que seguía (llamado "ángulo de refracción") depende de los índices de refracción que tengan el medio del que se sale y el que se entra.
Estos índices de refracción de un medio son el resultado de dividir la velocidad de la luz cuando se desplaza a través del vacío por la velocidad de la luz cuando se desplaza a través de ese medio; por ejemplo: El agua destilada tiene 1,33, el aceite de oliva entre 1,46 y 148, el cristalino del ojo está entre 1,38 y 1,4. No existen índices menores a 1.

Aplicando la llamada "Ley de Snell", si se pasa de un medio de menor índice a otro mayor, el ángulo de refracción, es menor que el de incidencia . Si, por el contrario, se entra en un medio de menor índice, el ángulo es mayor.
De hecho, cuando un rayo de luz se encuentra con un medio distinto a aquel por el que viaja, pueden pasar dos tipos de cosas: que cambie de dirección (reflexión, cuando no penetra o refracción (cuando penetra) o que no cambie (que sea absorbido porque el objeto es opaco o que no porque el objeto es transparente). Todos esas posibilidades se pueden dar a la vez en distintas proporciones.
Dispositivo electro óptico que sirve para convertir documentos físicos (dibujos, fotografías, textos…) en documentos digitales susceptibles de tratamiento informático.
Los escáneres son de diversos tipos (de tambor, planos, de película, etc…) y calidades, por lo que su coste puede variar bastante. Los componentes mecánicos, ópticos, electrónicos y de software que tienen hacen que sean más bien delicados.
En tipografía, símbolo o carácter normalmente con forma de círculo, cuadrado, triángulo o similar que se usa principalmente para marcar elementos en una lista (colocándose entonces al comienzo de cada frase).
Un bolo sencillo (cuadrado o redondo) no suele tener más altura que la letra m de la fuente a la que acompaña (es decir, un cuadratín).
Los bolos se usan también para rematar textos (indicando que han terminado), separar frases o usos similares.
También se llama "boliche" o "topo" (aunque ésta palabra abarca más signos similares).