Este es un pequeño glosario de artes gráficas y materias relacionadas con ellas (óptica, periodismo, tipografía, etc…). Además de un listado alfabético y de un formulario de búsqueda, se incluye un índice temático por áreas grupos de interés (PDF, Óptica, Tipografía, Preimpresión, etc…). En la medida de lo posible, se indica el equivalente en inglés, francés, italiano, alemán, catalán y portugués del término descrito.
Aviso: Este glosario está en una actualización interna importante. Durante algún tiempo algunos enlaces podrían no funcionar adecuadamente. Gracias por la paciencia.
Al hablar de las divisiones clásicas del contenido de un libro, una parte que precede a los capítulos y en la que se suele explicar el contenido, los problemas que el autor ha tenido para escribirlo, quién es el autor (si lo escribe otra persona) o cosas similares.
Además, en formato PDF para artes gráficas, "prologo" puede referirse al uso de un archivo PostScript llamado "prologue.ps" con instrucciones para el procesado previo al convertir documentos PostScript a PDF al pasarlos por Adobe Distiller. Esta última es una práctica cada vez más inusual, por lo que es raro tener que usar ese archivo salvo para tratar materiales antiguos (puede ir acompañado de un equivalente al final del procesado llamado "epilogue.ps").
En impresión, la pieza que lleva toda la información imprimible y que al recibir la tinta, distribuye ésta de forma significativa para que después se traslade a donde se va a imprimir (directa o indirectamente).
El nombre de plancha proviene de que en las imprentas antiguas esta pieza tenía forma de placa o plancha rígida. Posteriormente adoptó forma semicilíndrica para adaptarse a cilindros rotatorios.
Una plancha flexográfica.
Dependiendo del sistema de impresión, las planchas pueden ser de muchos materiales: Madera, Metal (acero, cobre, …), plástico, plásticos polímeros (flexografía) e incluso papel (litografía offset).
Una plancha de litografía offset.
Las planchas antiguamente se grababan directamente mediante herramientas como buriles o lápices grasos. También se hacían juntando laboriosamente, línea por línea, miles de tipos metálicos individuales o con máquinas que fundían el metal mientras se tecleaba.
Posteriormente, con el desarrollo de las tecnicas fotográficas y de tramados de semitonos, se pasó a la grabación fotoquímica usando pasos intermedios conocidos como "fotolitos". En la actualidad, se graba la plancha directamente desde los ordenadores. Es lo que se llama "grabación directa a plancha".
Este fenómeno, que se suele describir como un problema o defecto, es la base de la reproducción artística e industrial del color, ya que para lograr colores iguales no necesitamos que su curva de distribución espectral sea la misma (lo que es muy difícil), sino que simplemente nos produzcan la misma sensación de color.
La razón de que el metamerismo se considere un problema es que la percepción del color se basa en la suma de las curvas de distribución espectral del objeto iluminado (es decir: Lo que se ve) y el iluminante (es decir: la luz con la que se ve). Eso quiere decir que en muchas circunstancias bajo una iluminación dos colores se verán iguales pero con otra iluminación esa coincidencia no se produce porque las curvas finales (la suma de iluminación e iluminado) ya no produce ese efecto.
Por eso muchas veces se habla del metamerismo sólo desde este punto de vista y se describe como el fenómeno por el que dos muestras de color parecen iguales en unas circunstancias y distintas en otras.
El metamerismo más usual es el metamerismo del iluminante, que es el descrito más arriba y cuyo origen es la diferencia de las curvas de distribución espectral de las fuentes de iluminación, pero existe otro tipo de metamerismo, el llamado "metamerismo del observador", por el que para unos observadores dos muestras coinciden mientras que para otros no es así. Es más inusual que el metamerismo del iluminante.
Para poder hablar de metamerismo debe haber al menos dos muestras de color coincidentes en alguna circunstancia (el llamado "par metamérico"). Por eso no se debe confundir el metamerismo con la inconstancia del color (donde no hay dos muestras de color).