Inglés:Hairline, Hairline rule • Alemán:Haarlinie • Portugués:Fio de Cabelo, Fio de Navalha
La línea o filete más fino que un sistema de impresión es capaz de producir. No es muy conveniente usar esta definición dentro de un programa ya que si bien los filetes "ultrafinos" no dan problemas en las impresoras de oficina (y, de hecho, quedan bastante bien), en las filmadoras y grabadoras de planchas dan lugar a líneas tan finas que son irreproducibles y producen muchos quebraderos de cabeza.
Pequeño documentoimpreso de distribución gratuita creado con fines propagandísticos o publicitarios. A diferencia de las octavillas, tiene más de una página o cara, pero nunca supera las pocas páginas. Tampoco pretende describir una colección de materiales de forma exhaustiva —cosa que sí hace un catálogo—.
Tres vistas de un mismo folleto en formato tríptico.
Aunque no hay una norma de formato y paginación, es usual que los folletos consten de una sóla hoja doblada con dos, tres o cuatro pliegues para formar varias páginas. En este sentido, abundan los formatos de díptico o tríptico, y los plegados en acordeón, ventana, en cartera, cruz y otros.
En tipografía, un conjunto de caracteres que corresponden a un diseño y proporciones determinados. En buena ley, en un alfabeto dado, ese conjunto debe abarcar: las letras mayúsculas y minúsculas (acentuadas y sin acentuar), las cifras y signos matemáticos más usuales, los signos de puntuación y algunos caracteres variados (signos monetarios, ligaduras…).
Además (en alfabetos grecolatinos), una fuente bien diseñada debe incluir versiones de diseño de redondas, cursivas, negritas y negritas cursivas. Los diseños más trabajados incluyen seminegras, condensadas, versalitas, juegos 'expertos' y florituras diversas (en el sentido literal de 'florituras'). En tipografía digital, las fuentes deben incluir además pares de interletraje (kerning).
Todo el conjunto de diseños de una fuente se suele llamar 'familia' ("en la familia de la ITC Asura, falta una seminegra", por ejemplo).
Los diseños de fuentes de los tipógrafos más conocidos son auténticas obras de arte y artesanía basados en una tradición centenaria (aun para rechazarla).
Inglés:Display font, Fantasy font, Fantasy typeface • Portugués:Fonte de Exibição
Fuente ideada para usos especiales, normalmente en textos cortos decorativos y con la idea de llamar la atención. Sus rasgos principales buscan este objetivo y dejan de lado la legibilidad, en algunos casos hasta comprometer la lectura.
En general, no son fuentes pensadas para textos largos o de lectura continuada Suelen estar diseñadas más con la idea de evocar un concepto o ambiente que de comunicar un mensaje.
Inglés:Style sheet • Francés:Feuille de style • Italiano:Foglio di stile • Portugués:Folha de estilo • Catalán:Full d'estil
En diseño gráfico y multimedia, procedimiento de formateado del contenido mediante etiquetas o marcas cuyas características se describen en una zona aparte. El contenido y su aspecto se tratan por separado.
Así, por ejemplo, se puede etiquetar un texto como "texto base", con algunas palabras etiquetadas como "destacado" y luego asignar unas características tipográficas a ambas etiquetas (cuerpo, fuente, color, etc.). Esto evita tener que ir cambiando cada palabra o frase según la queramos con un aspecto u otro.
El uso de hojas de estilo facilita el formateo de elementos (es mucho más sencillo poner una etiqueta y luego asignarle propiedades que formatear mil y un elementos). Ayuda a la coherencia formal (es más difícil que haya pequeñas diferencias si cada clase de elementos se ha definido en un sólo sitio). Ayuda a la jerarquización formal (al crearlas se deben tomar unas decisiones generales que el formateo punto por punto no facilita) y da mucha mayor flexibilidad al cambio de aspecto (basta con cambiar un formato en la hoja de estilo en un único sitio).
En los casos más avanzados, las hojas de estilo se pueden incrustar unas dentro de otra (es decir, van en cascada o empotradas). La aplicación depende de si el elemento formateado pertenece ya a una clase definida como nivel superior (este es el caso de las hojas de estilo CSS).
Además, en algunos casos, las hojas de estilo pueden estar definidas como archivos aparte, a los que se llama o referencia desde los documentos que se quiere formatear. Eso simplifica el formateado masivo (de miles y miles de documentos si llega el caso).
Se usan mucho en programas en los que hay muchos elementos del mismo tipo y sistema de jerarquización. El ejemplo son los programas de maquetación en diseño gráfico y las hojas de estilo en cascada de las especificaciones CSS para lenguaje de hipertexto (como html o xhtml).
En España, cualquier cosa o persona en la que la carencia de buen gusto es evidente (normalmente muy evidente).
Un hortera con una camisa de 3,2 kilos de oro.
El horterismo (cualidad de ser o parecer hortera) es un hecho estético sin valoración moral, en diseño suele reunir alguna de estas características:
Es recargado: la desmesura es la norma. Un hortera no suele ser discreto, gusta de llamar la atención.
Es fallido: Busca el buen gusto. Hay una conciencia estética, fallida pero existente.
Es desproporporcionado: Combinaciones de color estridentes e inapropiadas para la mayoría del entorno, adornos excesivamente grandes, muy llamativos, exceso de ornamentación.
La representación de algo real o imaginario basándose en la luz y su efecto sobre la visión humana. Por extensión, se entiende que una imagen puede ser también la representación que el cerebro humano se forma por otros medios que no sean la luz y su efecto sobre la visión. Así, el ruido de cristales rotos puede formar en nuestro cerebro lo que es una imagen sonora.
En ese sentido, la imagen no es el hecho real, sino la representación que del hecho se hace el cerebro usando la visión (u otros sentidos complementarios). Si nuestros receptores reciben los estímulos necesarios, se puede formar una visión de algo que no sea un hecho real (es decir, que no existe). Eso es lo que, por ejemplo, permite la existencia de la fotografía, el cine o la televisión.
Programa de edición de documentos ideado para trabajar de forma concurrente con archivos de Adobe InDesign. Su formato nativo es una variante de XML.
Su sistema de trabajo permite la edición remota, aunque no sobre la marcha sino mediante el uso de paquetes llamados asignaciones que se envían al editor para que los remate. Al devolver las asignaciones, éstas se actualizan en el documento de InDesign de forma similar a como se hace con las imágenes vinculadas.
Al ser vínculos individuales, cada cadena de bloques de textos enlazado con InCopy puede estar en manos de un editor distinto al mismo tiempo, mientras el diseñador trabaja en alguna otra parte del documento de InDesign. Esto agiliza mucho el trabajo con tiempos de cierre críticos. El hecho de que los editores no puedan alterar la estructura del documento de InDesign es también un valor añadido en muchas circunstancias.
A pesar de su apariencia, InCopy no es una versión jibarizada de InDesign, ya que incluye capacidades de corrección de textos y control de versiones de las que InDesign carece.
Programa de maquetación (diseño de documentos con textos complejos y usualmente multipágina). Fue creado por Adobe para irrumpir en un mercado de autoedición que hasta su aparición dominaba Quark XPress tras la caída en desuso de otros programas como PageMaker, FrameMaker (ambos adquiridos por la misma Adobe) o Ventura Publisher (comprado por Corel).
En la actualidad, InDesign es el programa de referencia en su sector.
Adobe tiene un programa llamado InCopy especialmente pensado para trabajar con los textos de InDesign.
En tipografía y diseño gráfico, la cualidad que tiene un texto de leerse con facilidad. A mayor legibilidad, mayor facilidad para un observador de percibir el texto como tal texto y de captar el mensaje escrito.
Esta concepción de legibilidad no implica compresión del mensaje. No es una legibilidad cognitiva, sino perceptual: Tipográficamente el texto es legible no porque sea entretenido o porque esté escrito conforme a las reglas sintácticas adecuadas, sino porque se ha compuesto y distribuido de forma que su percepción es cómoda, sencilla y exige poco esfuerzo.
De este modo, podemos juzgar la legibilidad de un texto falso como Lorem ipsum... No hace falta entender lo que pone, sino juzgar si lo que pone es fácilmente perceptible.
Obviamente, después de esta legibilidad perceptual viene la legibilidad cognitiva: O sea, que para que nos entiendan no sólo hace falta escribir con buena letra, sino además poner cosas coherentes.